El analista Alberto Loyola considera que los jóvenes que asumen cargos directivos deben desarrollar sus cualidades blandas.
“Un jefe tiene que saber tratar a las personas”, asegura Alberto Loyolo, consultor en Recursos Humanos. Y, según él, ese suele ser uno de los errores más comunes entre los profesionales jóvenes que asumen una jefatura.
Para el especialistas, los estilos autoritarios, la falta de feeback y el poco conocimiento de los colaboradores conforman el talón de Aquiles de los jefes jóvenes, quienes, muchas veces, apelan al modo dictatorial como mecanismo de defensa ante la diferencia de edad con sus empleados.
Así, los subordinados pueden sentirse frustrados y considerar que la autoridad del jefe no es legítima ya que sus cualidades no corresponden al perfil del puesto de trabajo.
Otro de los errores más comunes es la falta de reconomiento del trabajo y la carencia de reuniones para definir objetivos. “Muchas veces los empleados se pasan horas terminando un proyecto; llega el jefe, los presenta y ni siquiera dice gracias. Eso desmotiva”, comenta.
La solución
Según Loyola, las compañías deben entrener a los jóvenes jefes, pues muchas veces fueron ascendidos por su buen desempeño en el trabajo, sin tomar en cuenta sus cualidades interpersonales.
“Uno de los talleres más conocidos en el mercado es ‘Primera vez gerente’. Allí les enseñan a liderar a las personas y a mejorar su trato con los empleados para mantener al equipo motivado”, comenta.
Diario Gestión (11/07/2012)
Jose Inocencio Injante Uchuya dice
Bueno cuando es Joven y Jefe la mayor parte llega con mucha adrenalina y no respeta a sus subordinados como personas, solo impone su autoritarismo. Es como cuando llega un Alferez de la PNP a una comisaria y abusa en todo sentido de los Policias subalternos, sin importarle que algunos podrian tener la edad de sus Padres. Yo fui uno de ellos que llegue a ser jefe muy joven casi a los 23 años, pero luego llego un nuevo Gerente de Administracion, el ilustre Mario Carlos Vargas Benites y que despues de 3 meses que tomo las riendas de la Empresa Estudio 501 me “bajo” al puesto “Z” pero como no le respondio el “Chato Ortiz” a los dos años nuevamente recupere mi puesto de Jefe de Contabilidad, despues de haber pasado nuevamente por todas las Areas Contables de Estudio 501. Fue una gran leccion que recibi del Sr. Vargas.
Ignacio Quispe Laime dice
Uno tiene que saber aplicar los valores con los trabajadores