Hay 66 universidades que funcionan con licencia provisional

La titular de la Sunedu afirma que si no se adecuan a nuevos estándares corren riesgo de ser cerradas.

La implementación de la Superintendencia de Educación Universitaria (Sunedu) no ha terminado con el nombramiento de Lorena Masías como su titular. La tarea recién comienza. Ahora falta la selección de los miembros del consejo directivo.

“Vamos a formar, además, los equipos de trabajo para hacer la propuesta de estándares de calidad para la educación superior universitaria, los cuales serán aprobados por el consejo directivo”.

¿Qué es lo que precisarán esos estándares?

Las condiciones y plazos para la adecuación de las nuevas universidades , que también regirán para las que ya existen.

¿Hay proyectos para crear más universidades?

No hay ningún proyecto. Lo que sí hay son universidades en proceso de institucionalización. De 142 universidades, 66 están en dicho proceso. La idea es fijar los estándares de calidad para que estas universidades alcancen, por así decirlo, la excelencia.

¿Qué significa estar en procesos de institucionalización?

Significa que no tienen autorización. La ANR daba una autorización provisional para que funcionaran. Bajo el nuevo esquema, la Sunedu debe de licenciarlas si cumplen con los requisitos que establezcamos.

¿En ese grupo hay universidades públicas y privadas?

Son 20 públicas y 46 privadas.

¿Cuál sería el plazo que tendrían esas 66 universidades para licenciarse?

Los plazos los va a fijar el consejo directivo. Pero como máximo tendrían cinco años.

¿Qué pasará con las que no se licencien?, ¿son las que deberían de cerrarse?

Son las que deberían de cerrarse. Lo que tenemos que tener es mucha consideración para que los estudiantes se puedan trasladar, tener convenios y, en algunos casos, evaluar si terminan las carreras.

La ANR emitió una resolución invalidando los dos procesos de admisión del 2014 hechos por la Universidad Autónoma, pues no hubo veedores. ¿Qué pasa con esos alumnos que ingresaron?

Son casos especiales que hay que revisar, el consejo directivo tiene que evaluar y minimizar los problemas que puedan surgir con los estudiantes universitarios.

¿Cuál es la salida para los alumnos?

Hay que estudiar cuál es la mejor salida. Lo que nos va a guiar es evitar los problemas para los alumnos.

¿Hay otros procesos de admisión declarados nulos?

No estoy al tanto si hay otros casos. Las políticas tienen que estar claras, por eso es necesario que se establezcan los estándares y que estos sean transparentes.

La mayoría de universidades convocó asambleas estatutarias para adecuarse a la nueva ley; San Marcos no. ¿Qué se hace en ese caso?

Cuando son problemas internos de las universidades, lo que hay que buscar es que internamente lo hagan.

Pero este problema interno es sobre un tema general que compete a todas las universidades.
Esos son casos internos, lo que hay que buscar es que haya una resolución dentro de su autonomía. Hay una dirección dentro del Ministerio de Educación que verá los temas de las universidades públicas. Esta dirección verá los casos de la adecuación de la ley.

¿Se puede llegar a la intervención de una universidad, como sucedía con la ANR?

Eso no está contemplado en la norma. La ley actual no faculta a intervenir ni a la Sunedu ni al Ministerio de Educación.

¿La evaluación ya se inició? 

Está empezando y de manera gradual. Hay que hacer las propuestas de condiciones y plazos de calidad.

DIXIT

“He escuchado, por el lado de los privados, que la Sunedu va a ser una traba en el desarrollo del sector. Esa no es la intención”.

“Me siento empoderada con la ley y las funciones. No soy una dictadora, sino una supervisora”.

Diario Gestión (22/01/2015)